Está subiéndose por el puente Pío Nono. Con las piernas colgando en el río Mapocho y los brazos tocando la calle. De seguro ha sido la fotografía imperdible de esta última semana.
Se trata del robot de 9 metros, obra del artista argentino Pablo Curutchet, instalado a propóstio del Primer Festival Hecho en Casa. Su cuerpo de cartón ha servido de pizarra para declaraciones de amor y llamados de atención al Presidente. Sólo falta que alguien lleve una escalera y le pinte una sonrisa, porque hasta ahora no tiene ni cara ni nombre.
fome..copia penca de argentina