La pieza artística hecha en bronce, es la «mano más completa» realizada por el artista, pudiendo apreciarse como su palma emerge de la tierra casi en su totalidad.
A inicios de diciembre, con motivo de cumplirse los 10 años de gestión de la Fundación Cultural de Providencia, la entonces alcaldesa Evelyn Matthei inauguró la obra número 43 del Parque de las Esculturas de Providencia. Una imponente mano de bronce (cobre y zinc) compuesta por 48 piezas que se fueron moldeando y fundiendo en el Taller Montes Becker.
Su autor es el reconocido artista Mario Irarrázabal, el mismo que creó la denominada “Mano del Desierto” (1992) ubicada al sur de Antofagasta, «Dedos» en Madrid, España (1987) y «Mano Punta del Este» (1982) emplazada en el balneario uruguayo.
“Tengo la esperanza que la gente la quiera y la vea como algo positivo y optimista, por eso quise llamarla Mano Abierta, para que reflexionen un poco qué significa una mano abierta, que genere optimismo” dijo Irarrázabal al momento de estrenar la pieza.
La enorme figura en tonos verdosos, pesa dos toneladas y tiene 4 metros de alto, 4,55 metros de largo y 1,30 metros de ancho. Y se suma a un recorrido al aire libre donde también se pueden apreciar entre otros, los trabajos de Marta Colvin, Federico Assler y Lucía Waisser, todos ganadores del Premio Nacional de Arte.
- Dónde: Parque de las Esculturas, ubicado en Avenida Santa María 2205. Providencia.
- Cuándo: Abierto de lunes a lunes, de 8.00 a 22.00 horas.
- Cuánto: Entrada liberada.
