*Por Paulina Cabrera C. / Fotos: Paulina Cabrera y Gonzalo Orellana
A don Juan Araya se le ilumina la cara cuando le preguntamos si ama El Monte. Y es que ha vivido prácticamente toda su vida aquí. Desde los 7 de sus 75 años ha sido un fiel defensor del pueblo. Primero como coleccionista, luego como profesor y director de escuela (lo conocen al menos dos generaciones de alumnos) y hoy como director ad honorem de dos museos que están alrededor de la Plaza Independencia: El Museo Patrimonial y Arqueológico que reúne los objetos de sus antecesores y el del Libro, que nos dice es un lugar inédito en Chile porque aquí no se prestan ejemplares (sólo se los mira) y que es en honor a José Santos González Vera ,Premio Nacional de Literatura y autor de Vidas Mínimas y Alhué (Fue amigo de Pablo Neruda y Gabriela Mistral).
Conocedor profundo de la historia de su entorno, es todo un personaje en la localidad. El día que preguntamos por él, bastó con un par de indicaciones del jardinero municipal de la plaza y dos transeúntes para llegar hasta su casa. Nos abrió especialmente las puertas de su museo antes de irse al programa de la radio Manantial de Talagante en donde participa con una sección cultural, y nos mostró su colección de fotos, recuerdos y anécdotas que espera algún día plasmar en un libro.
¿Usted nació en El Monte?
No, fui trasplantado cuando tenía 7 años. Hoy tengo 75, y siempre he trabajado en la parte cultural de este pueblo. Fui profesor 40 años en la Escuela República de Ecuador, 12 años fui subdirector y 10 años fui director de esa escuela, pero hace 10 ya que estoy jubilado.
¿Cómo nace este Museo que tiene aquí a un costado de la Plaza?
Aunque usted no lo crea, durante toda mi vida me dediqué a coleccionar objetos. Desde niño, lo primero que coleccioné fueron Penecas, una revista infantil fundada en 1908 cuando apenas deletreaba palabras y empecé a comprar cosas patrimoniales de la gente y de la noche a la mañana nació la idea de fundar un pequeño museo con el apoyo generoso del alcalde Francisco Gómez. Este museo fue fundado el año 2005 para preservar parte del patrimonio de las familias que han vivido siempre en El Monte.
¿Siempre estuvo en este lugar?
El museo comenzó al frente, en una construcción abandonada tras el terremoto. Ese edificio de 1884 que partió como la escuela José Miguel Carrera, que en los cuarenta era la Escuela 6 de niñas, y en la tarde la Escuela 5 de hombres. Se fusionaron y el 16 de julio de 1946 en nuevo edificio se trasladaron estos dos colegios y se llamó Escuela República mixta número 6 República del Ecuador.
¿Cuál es el objeto más atesorado de este museo?
Para hacer algo en la vida uno tiene que tener una pasión, y a mí esta me condujo a hacer este museo y al más pequeño objeto yo le tengo bastante cariño y me deleito mirándolo aunque lo he visto muchas veces. Este museo está atestado de objetos, está muy lleno, porque es lo tenemos. Habría que separar las cosas en vitrinas, pero este es un museo de pueblo y no están seleccionado los objetos. Pero si a los visitantes les causa un poco de nostalgia creo que se cumple el objetivo que tenemos, de recordar aquel pasado.
- Dónde: Plaza Independencia de San Francisco de El Monte
- Cuándo: Lunes a viernes de 10.00 a 13.00 horas y de 15.00 a 17.30 horas. Sábado hasta las 13.00 horas
- Cuánto: Entrada liberada
«Le voy a contar un poco de la historia de El Monte»
En el año 1573 se construyeron tres conventos franciscanos, uno en la Chimba, el de Alameda y el de San Francisco de El Monte que estaba supuestamente al otro lado del río en Lo Aguirre y que por problemas de inundación del río Mapocho tuvieron que trasladarse a la plaza.
Los sacerdotes iban al frente de batalla durante la conquista de los españoles. Francisco Solano era un religioso con un cargo superior en España y por los datos de los informes del convento encontró que este lugar era bastante parecido a donde vivía y por eso le habrían colocado a este pueblo San Francisco de El Monte, aunque por alguna razón -desde hace unos años- sólo le dicen El Monte.
San Francisco de El Monte nunca fue fundado, sino que nació alrededor de cuatro haciendas, las de San Miguel, Lo Chacón, El Paico y Chiñigue.
En 1773 cuando Ignacio de la Carrera se casó con Paula Verdugo en dote le regaló la hacienda San Miguel. Los Carrera nunca vivieron en la Hacienda, esporádicamente venía José Miguel cuando era castigado por su papá por portarse mal, haciéndolo trabajar en la hacienda un par de semanas. La que vivió aquí fue su hermana Javiera Carrera durante 40 años. Desde 1822 cuando volvió de su exilio en Uruguay, donde estuvo tras el fusilamiento de su hermano. Vivió hasta su muerte en 1862 y según los datos históricos, heredó la hacienda a sus familiares directos.