Santiago sigue dando que hablar en el mundo. El medio británico The Telegraph enumeró 21 razones para visitar Chile en las próximas vacaciones, aprovechando el vuelo directo que tendrá British Airways de aquí a Londres y viceversa a partir de enero de 2017. Según el plan, el avión que se usará para esta ruta es el Boeing 787-9, con capacidad para 216 pasajeros, que podrán volar sin escalas los días lunes, miércoles, jueves y sábado.
Las razones que menciona el diario británico son variadas, desde que somos el país más angosto del mundo hasta un paseo en bicicleta por la carretera austral. Lo mejor es que dentro de los argumentos hace alusión a cinco panoramas que tienen que ver con pasear por nuestra querida ciudad:
1. Los centros de esquí en las afueras de Santiago (Chileanski.com)
Portillo es el centro de ski más antiguo de Sudamérica. Comenzó con la construcción del ferrocarril que cruzaba Los Andes permitiendo viajar desde Chile hasta la ciudad de Mendoza, en el año 1887. En ese entonces, los ingenieros noruegos Elmar Rosenquist, Knud Berg y Michel Hermundsen decidieron atravesar la zona en ski para realizar un estudio de terreno. Hoy, con más de 50 años de historia, el lugar conserva la misma calidad de nieve y hermosos alrededores que encantaron a los primeros visitantes de la zona y sigue renovando sus entretenciones y servicios para seguir maravillando a quienes llegan hasta Laguna del Inca para disfrutar de un centro de ski de excelencia.
La Parva, a 50 kilómetros de Santiago, tiene una hermosa vista al valle y es el centro invernal con mayor población, por la cantidad de refugios y departamentos privados que se arriendan durante la temporada de esquí. Al igual que en otros centros, la práctica del Snowboard y el Heliski se encuentran implementadas para los que disfrutan de éstas modalidades.
El Colorado, a 36 kilómetros de distancia de Santiago, nace en 1935 cuando se construye el primer refugio de nieve en Farellones y en 1948 el primer andarivel de arrastre, la Gran Bajada. En 1941, Farellones comenzó a funcionar como un pueblo de montaña, brindando todos los servicios necesarios a sus visitantes. En 1953, se inauguró el andarivel silla doble, habilitando la zona esquiable oeste.
Valle Nevado, el centro de ski más grande de Sudamérica, se ubica a 46 kilómetros al oriente de Santiago. Posee una excelente calidad de nieve, por su altura y orientación y un clima privilegiado, con un 80% de días despejados en la temporada. Abre en 1988, inspirado en el complejo invernal Les Arcs y en los resorts invernales de Francia. Aquí se pueden encontrar tres excelentes hoteles, cuatro tipos de apartamentos, diferentes variedades de restaurantes y todo tipo de servicios para disfrutar de la montaña.
Lagunillas está a 67 kilómetros de la capital. Este pequeño centro recibe a los fanáticos del deporte y amantes de la naturaleza y la tranquilidad, en un ambiente familiar que otros centros no poseen, esto hace la experiencia del ski y snowboard fascinante para quienes nos visitan en familia o con amigos. Lagunillas ofrece servicio de arriendo de equipos que incluyen ski, snowboard, botas, bastones además de clases de ski grupales y privadas incluyendo también snowboard.
2. Realizar rafting en el Cajón del Maipo
Las aguas del río Maipo ofrecen toda una aventura para los más osados. Cuenta con secciones de rápidos clase II, III y IV, siendo la escala internacional catalogada de I a VI.
3. Las «excéntricas» casas de Pablo Neruda
La Chascona es una de las tres viviendas que fueron propiedad del poeta Pablo Neruda. Instalada en los faldeos del cerro San Cristóbal, en pleno Barrio Bellavista, funciona actualmente como un museo que alberga las colecciones del autor y la sede de la Fundación Pablo Neruda. Fue declarada Monumento Nacional en 1990. Las otras dos casas están en la quinta región, una en Isla Negra y la otra en Valparaíso, la llamada La Sebastiana.
4. Recorrer el Cerro Santa Lucía
En pleno centro de la ciudad este cerro nos invita a recorrer sus miradores, monumentos y fuentes creadas bajo la intendencia de Benjamín Vicuña Mackenna. Entre sus atractivos se cuenta el Castillo Hidalgo, construido en la época de la colonia como fuerte militar, las Terrazas Caupolicán y Neptuno (con su hermosa fuente) y la Ermita Vicuña Mackenna, de fines de 1700 y que contiene el sepulcro de la familia de Benjamín Vicuña Mackenna, el promotor de las obras de hermoseamiento del lugar.
5. Comer en un local de “comida típica” como Peumayen
Más que comida típica lo que hace Peumayén es Ancestral Food, resultado de una profunda investigación sobre nuestras raíces gastronómicas, plasmada en una carta que combina productos, técnicas y preparaciones originales de las principales culturas ancestrales del Chile prehispánico. Los platos se sirven sobre piedras y la carta incluye quinoa, chañar, charquicán de motemei, filete de caballo e incluso de pulmay. ¿Dónde? En Constitución 136.
Las otras razones de las que habla The Telegraph son:
- El desierto de Atacama
- Visitar los palafitos en la isla de Chiloé
- Recorrer la Patagonia
- Las casas de colores de Valparaíso
- Es el país más angosto del mundo
- Se puede «conocer un puma» visitando las Torres del Paine
- Conocer la «Montaña Mágica Lodge», en Huilo Huilo
- Conocer el «fin del mundo» visitando el Cabo de Hornos
- «Llegar a las estrellas» visitando los observatorios en Atacama
- Visitar Isla de Pascua
- Conocer el Glaciar Pío XI, el más grande de Sudamérica
- El «pueblo fantasma» de Humberstone
- Está la «piscina más grande del mundo», en San Alfonso del Mar
- Realizar trekking alrededor del volcán Villarrica
- Un paseo en bicicleta por la Carretera Austral
- Olas «dulces» de la playa Punta de Lobos, en Pichilemu