En medio de las palmeras y bajo un tibio sol, este sábado disfrutamos de la segunda jornada de De Picnic Santiago. Abundaron los amigos, rico queque y empanadas camarón queso, delicias que no pasaron inadvertidas para toda una pandilla perruna que fue la protagonista de la jornada. Grandes, chicos, peludos y pelados de cuatro patas estuvieron pendientes de todo lo que comimos.
El más osado, saltó encima de un canasto y se apoderó de un pan con queso y mostaza que terminó de souvenir en el pasto.
Hermoso día que finalizó con juegos entre búrbujas de jabón.