Fue como un recital masivo, pero en donde los rock stars fueron los personajes que hacen enfervorizar a los más chicos. Nunca había visto a tanto centenar de pequeños gritando y coreando al Perro Chocolo y a la Chancha Pepa, los máximos ídolos que este domingo desfilaron en la Paris Parade.
La fiesta navideña en la calle más grande de Sudamérica, congregó a más de un millón de personas, en donde claramente los niños y niñas fueron los protagonistas. Agolpados tras las vallas de seguridad, y muchos de ellos con la cara pintada y disfrazados de superhéroes, chilindrinas y princesas, esperaron ansiosos el paso de My Little Pony, La Gallina Pintadita, Po de Kung Fu Panda, Hello Kitty, Las Chicas Superpoderosas y el Papá Oso del cortometraje Historia de un oso, ganador del premio Oscar y el gran anfitrión de este año.
También fueron testigos de un carro con el mismísimo Viejo Pascuero, una banda de 54 músicos, comparsas nortinas y un grupo de cheerleader que hizo piruetas en el aire durante todo el trayecto por la Alameda, desde Plaza Baquedano hasta el frontis del Palacio de La Moneda.
Sin embargo, lo más desconocido y especial de todas las figuras que desfilaron fue sin duda Hiposol, el personaje creado por Martina, una niña de ocho años que vive en Talca y que ganó el concurso para crear el globo del amigo imaginario. Qué ganas de haber visto su cara, cuando vio por televisión, fotos y en la misma calle, a su dibujo cobrando vida en medio de la multitud. Seguramente, hoy, la más feliz de todos.
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