Son las 11 de la mañana del sábado y el Barrio Bellavista comienza a despertar. Una que otra botella y lata de cerveza es la herencia que dejó la noche en la calle. Los encargados de los locales barren las veredas y un grupo de ciclistas ya subió y bajó dos veces el cerro San Cristóbal.
A la misma hora, en Domínica 25 se abren las puertas de Nación Pedal. Claudio aprovecha de tomar una foto a las bicicletas que llegaron de Copenhague y Sebastián trabaja entre juegos de llaves, cámaras, troncha cadenas y por supuesto más bicicletas.
Desde marzo pasado, la pareja de amigos apuntalan de lunes a lunes el segundo local del bicicentro que tiene su sede matriz a la salida del metro Manuel Montt, lugar que aprovecha la conexión de la bicicleta con el transporte masivo, el metro y la ciclovía de Antonio Varas.
Claudio Olivares y Rodrigo Vega son los dueños de Nación Pedal y Sebastián Oyarzo es el hombre encargado de Bicimensajeros, el servicio de mensajería asociado, que como imaginarás se hace en bici, y no cualquiera, si no las de carga (marca bullitt) que pueden transportar hasta 100 kilos de peso.
«Tenemos nuestro centro de operaciones acá. Bicimensajeros está formado por tres personas, Pablo, Renato y yo. Ellos son los que recorren las calles de Santiago en bullitt mientras yo me encargo de recibir los llamados y coordinar los viajes, junto con las labores administrativas propias de una empresa» comenta Sebastián sobre la flota que supera los 200 viajes mensuales. «Lo más grande que hemos llevado es una cama tamaño King (de 1,8 por 2 metros), aunque tuvimos que hacer dos viajes, uno para el colchón y otro para la base» afirma este visionario que lleva 7 años en el pedaleo.
Nación Pedal (II) es estacionamiento, tienda y taller mecánico. «El nuevo proyecto de Domínica 25 se dio como una evolución natural y se suma en el momento en que cumplimos cuatro años de vida con el bicicentro de Manuel Montt. Al estar al lado de la entrada del Parque Metropolitano por Pío Nono, claramente nos toca atender un público más deportivo. Es por eso que abrimos incluso los domingo, pero es mucha la gente que en los días hábiles se transporta conectando desde avenida Perú a Pío Nono y estamos ahí para atender esos importantes viajes» dice Claudio.
Acá se pueden encontrar desde U-Lock (candados de alta seguridad), luces y cascos, hasta capas para la lluvia y modelos de bicis traídas desde Dinamarca y Estados Unidos, incluidos los daneses bullitt de los cuáles son el representante oficial en Chile.
Un hermoso mueble de metal rojo contiene llaves y tuercas de todos los tamaños y en el largo mesón (una ex barra de bar) se pueden revisar el resto de los productos entre los que se cuentan patentes «Una bici más», coloridos timbres, pedales y estrellas centrales además de originales llaveros confeccionados con cámaras que alguna vez rodaron por las vías.
«Sabemos que el espacio fue un lugar en el que se hacían eventos y URBN STGO lo utilizaba también para sus muestras de arte accesible. Y bueno, gracias a esos maravillosos eventos, heredamos una barra y desde un inicio sabíamos que le podíamos dar un bueno uso organizando encuentros culturales, talleres y charlas relativas a la ciudad, el transporte, acceso, creatividad y, por supuesto, la bicicleta. Ahí es donde Arriba ‘e la Chancha lleva a cabo sus actividades de promoción de la bici» relata Claudio sobre el espacio que ocupa el primer piso de la casona verde y ladrillos.
Nación Pedal, que nace desde la convicción de que la bici está al alcance de todos, es un taller que se recomienda de boca en boca. Y el éxito se debe a que sus dueños y equipo saben de lo que están hablando. Son ciclistas urbanos hace años y conocen las necesidades del pedaleo cotidiano especialmente para quiénes usan la bici como medio de transporte.
«Trabajamos para mantener a las personas usando la bicicleta la mayor cantidad de veces en la vida como modo de transporte. En ese sentido es clave establecer lazos de confianza. A lo largo de estos cuatro años que llevamos trabajando hemos ganado muchos amigos que partieron como clientes. Hay una responsabilidad muy grande porque somos parte de la cadena de viajes de muchas personas y debemos estar ahí para mantenerlos en movimiento» asegura Claudio que lleva veinte años movilizándose sobre las dos ruedas.
El amor por el pedaleo es algo que se respira en el lugar. Todos disfrutan sentir la brisa, incluso la lluvia e interactuar con la ciudad y sus espacios. «Me gusta Santiago porque he cambiado la forma de verlo gracias a la bicicleta. Si bien en la calle hay algunos que no andan con buenas maneras, moviéndote en bicicleta aprendes a comunicarte distinto y a no entrar en peleas o conflictos innecesarios. En el bullitt la ciudad se ve más amigable, por la curiosidad que despierta en la gente que te ve pasar, te dan el paso, te respetan más, te saludan y felicitan» dice Sebastián.
Y Claudio está de acuerdo: «pedaleando se abre el espacio para vincularse con la infraestructura urbana, si te conectas realmente eres capaz de llegar a ver el crecimiento de una planta, los brotes de las flores, sabes cuando hay los cambios más mínimos en tu ruta y estableces un vínculo emocional con el espacio que habitas. Porque como siempre digo, no hay apuro, vas en bici».
Dónde: Nación Pedal Bellavista, Domínica 25 // de lunes a viernes de 14.00 a 20.00 horas // sábado y domingo de 11.00 a 14.00 horas.
Nación Pedal Manuel Montt, Dr. Manuel Barros Borgoño 020, local 22 (salida del metro) // lunes a viernes de 8.00 a 20.00 horas // sábado de 11.00 a 14.00 horas
Más info: www.nacionpedal.com y www.bicimensajeros.cl
