Gracias a un convenio con la Universidad Andrés Bello y el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, el mítico espacio levantado por los músicos Pepe Fuentes y María Esther Zamora podrá seguir funcionando y así mantener vivas nuestras tradiciones folclóricas.
“Me da valor el hecho de que mi Pepe me esté empujando, que desde el cielo esté bendiciendo esto, que vamos a lograr y que la Casa de la Cueca va a estar con la bandera en alto, como siempre hemos querido”. Así comentó la folclorista María Esther Zamora la buena noticia que impidió el cierre definitivo de La Casa de la Cueca. Esto, tras un convenio firmado con la Universidad Andrés Bello (UNAB) y el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, que permitirá un aporte económico mensual para apoyar el funcionamiento del local y abordar temas de difusión, promoción y educación, entre los que se cuentan clases de cueca, encuentros con músicos nacionales y conciertos.
Los últimos meses no habían sido fáciles para María Esther. Al cierre del recinto Avenida Matta 483 producto de la pandemia, se sumó en diciembre la muerte de su pareja y compañero Pepe Fuentes (89), con quien conformaba la mítica dupla con la que introdujeron la cueca a las nuevas generaciones a través de colaboraciones con el grupo Los Tres y populares presentaciones en la Yein Fonda y el Bar Liguria.
El arriendo de la casona se pagaba con la pensión del fallecido folclorista, lo que puso en peligro la continuidad de la Casa de la Cueca, que por más de 30 años ha combinado folclor, música popular y comida típica chilena preparada por artista.
El convenio, afirma la folclorista, es un empujón para preservar aquello por lo que tanto luchó junto a su esposo y, además, “le sirve mucho a la gente porque la música chilena levanta el alma, el espíritu y todos los que son allegados a la Casa de la Cueca se van a sentir tremendamente felices”.
“Quisimos apoyarlos por ser una iniciativa cultural de relevancia nacional y buscamos la alianza con el Ministerio, entidad que inmediatamente estuvo dispuesta a colaborar. Es así como surge este convenio entre las tres instituciones, con el objetivo de que la Casa de la Cueca no desaparezca, por ser un espacio que rescata nuestro baile nacional”, dijo al respecto el rector de la UNAB, Julio Castro.
Por su parte, la ministra Consuelo Valdés enfatizó que “la Casa de la Cueca conserva y resguarda muchas expresiones patrimoniales y se ha convertido en un espacio relevante para agrupaciones cuequeras, artistas, músicos, cultores y para todas las personas que vibran con esta tradición. Pensar en este lugar es también recordar al querido Pepe Fuentes”.