Las mejoras incluyen la restauración de los dos carros de pasajeros (que pasarán de color verde a rojo), la reparación de muros y la incorporación de elementos que permitan una accesibilidad universal en las escaleras de acceso. Se espera que los trabajos terminen en noviembre próximo.
Subir el cerro San Cristóbal en pocos minutos y con una vista privilegiada. Desde el 25 de abril de 1925, miles de personas han podido recorrer a bordo del Funicular de Santiago, los 485 metros que existen entre la estación Pío Nono y la estación Cumbre que nos deja a pasos del Santuario de la Inmaculada Concepción y de una sorprendente panorámica de la ciudad.
El tradicional sistema de dos carros de pasajeros sobre rieles metálicos, que marcó el inicio de la gran transformación del cerro en el siglo pasado, fue traído de la casa Ceretti y Tanfani de Milán. En sus inicios, el medio de transporte tuvo un sector de primera clase, con asientos y separado por cortinas, y uno de segunda clase, con espacio al aire libre y en donde las personas debían viajar de pie. Distinción que quedó atrás en el tiempo, junto con las vistas de un Santiago de construcciones bajas y frondosa vegetación.
Desde sus inicios, el Funicular del Parque Metropolitano ha experimentado una serie de mejoras. En el año 1968, el techo de madera original fue remplazado por uno de acero y tela, similar al que tiene actualmente; en el 2013 y 2014 fue sometido a obras de mantenimiento y en noviembre pasado comenzó una nueva renovación que promete estar lista en cinco meses más.
Los arreglos -que involucran una inversión de 1.375 millones de pesos- son financiados por el Servicio de Vivienda y Urbanización (Serviu) de la Región Metropolitana y contempla la mantención de los carros, la sala de máquinas y los muros colindantes, además de cambio de la techumbre del andén de la estación Cumbre, nuevos circuitos de alumbrados en la estación Pío Nono y la incorporación de elementos que permitan una accesibilidad universal en las escaleras de acceso.
«Con este proyecto se buscó hacer una recuperación integral del sistema después de 96 años en funcionamiento. Junto al Serviu RM se está trabajando en la renovación integral de todo el sistema mecánico, de infraestructura, también de las estaciones y algo muy importante: El mejoramiento de los carros. Los carros también son un elemento simbólico de esta construcción y hoy día lo único que queda de los originales es su chasis y, por lo tanto, estos carros van a ser acondicionados en color y en estructura, manteniendo sus líneas originales, pero tratando de poder llevarlo a los estándares de accesibilidad de hoy» indica Martín Andrade, director Parque Metropolitano de Santiago.