S. Giuseppe Battista (San Juan Bautista), la obra que pintó Michelangelo da Caravaggio en 1602 está aquí, en la Sala Chile del Museo Nacional de Bellas Artes. Entrando al espacio ubicado en el segundo piso de la pinacoteca, te inunda una atmósfera espaciosa y oscura que te pone a tono con quien fue el iniciador del Barroco.
Al fondo del salón, enmarcado en una madera dorada, el óleo de 129 por 95 centímetros te espera silencioso. Una banca instalada a un par de metros y la prohibición de tomar fotografías, te “obliga” a concentrarte en la pintura y a apreciarla en todo su esplendor.
Así lo pudimos comprobar el día que fuimos a mirarla de cerca. Pasamos algunos minutos admirando el realismo de este joven Juan Bautista, desnudo y sonriendo, como en el gesto de quien es sorprendido. Y otros minutos más mirando al público, algunos decepcionados por no poder sacar la cámara y otros en calma, tomándose una larga pausa para la contemplación. El que más me llamó la atención fue un señor de pelo cano, que podría tener la edad de mi papá (unos 70 años) que sentado en la banca, leía un libro sobre el italiano. Ensimismado en la lectura, a ratos se detenía para sacar su monóculo y admirar nuevamente la obra para analizarla cuidadosamente.
Esta es la primera vez que una obra de Caravaggio está en Chile. La pieza conocida mundialmente como Joven con un cordero fue encargada por el coleccionista romano Ciriaco Mattei en momentos en que el pintor era uno de los artistas más prestigiosos y solicitados de Roma. Si bien terminó pobre y exiliado por haber asesinado en una pelea callejera al jefe de una banda armada en capital italiana, pasó a la historia del arte como el maestro del claroscuro, de la luz y oscuridad, que se distinguió de los demás por el dramatismo en sus óleos y por humanizar a los personajes bíbilicos y religiosos sin idealizarlos, dándoles realismo y cercanía. “Este acercamiento de lo sagrado a la realidad es quizá uno de los motivos de la actual popularidad del pintor, quien no se libró de la polémica por usar a mendigos o prostitutas para representar a figuras santas, sin ocultar sus pies sucios, sus arrugas, sus piernas hinchadas o sus ropas hechas andrajos” escribe Juan Narbona en la revista Nuestro Tiempo de la Universidad de Navarra.
Quien sabe quien habrá sido el modelo que utilizó para pintar a Juan Bautista, pero lo que si está estudiado son todos los elementos que aparecen en la que es una de sus pinturas más famosas. Explicación, que se puede observar en uno de los muros de la sala y que habla en todo momento de las citas religiosas de la obra. El racimo de uva, o vid, representa el vino que en la eucaristía se transforma en promesa de redención y salvación; el carnero que tiene el joven sobre sus hombros simboliza el sacrificio, “el cordero de Dios” que quita los pecados del mundo (Juan 1:29) y las hojas verdes de verbasco, usado como mecha de lámparas de aceite, es símbolo de sacrificio y resurrección (Cristo dice “Juan es la lámpara que resplandece”, Juan 5:33). Sin embargo, la cita más sorprendente es la que Caravaggio hace a Miguel Angel, al usar el manto rojo, la piel de camello y la propia postura de Juan Baustista, la misma que el otro genio italiano utilizó en los cielos de la Capilla Sixtina.
Así que la recomendación es ir sí o sí y leer un poco más de Caravaggio para disfrutar la exposición en conocimiento. Aprovecha este viernes 18 de noviembre de Museos de Medianoche, en donde seguro será una las exposiciones más visitadas en Santiago.
- Dónde: Museo Nacional de Bellas Artes, José Miguel de la Barra 650
- Cuándo: Hasta el 18 de diciembre, de martes a domingo de 10:00 a 18:45 horas (atentos al paro de funcionarios públicos)
- Cuánto: Entrada liberada
- Más info: Caravaggio, el pintor amado que se odió a sí mismo
Visitas Mediadas
Para quienes quieran conocer más sobre la exposición, el área de Mediación y Educación del museo ofrece la posibilidad de acceder a visitas mediadas gratuitas, dirigida a cursos y delegaciones, de martes a viernes a las 10:30, 11:30, 12:30, 15:30 y 16:30 horas (Inscripciones a mediacion.educacion@mnba.cl). El sábado y domingo se ofrecen visitas guiadas, sin inscripción previa, a las 10:30, 11:30, 12:30, 15:30, 16:30 y 17:30 horas.
Más actividades
Para que el público profundice su conocimiento sobre el célebre artista, el Bellas Artes, junto al Instituto de Estudios Avanzados de la Universidad de Santiago y el Instituto Italiano de Cultura, ofrecen actividades complementarias y gratuitas durante la exposición:
Ciclo Caravaggio y Cine: Desde el 11 de octubre una múltiple mirada a siete películas sobre la herencia «caravaggesca», desde los maestros de las primeras décadas del siglo XX, como Sergei Eisenstein, hasta directores de la cinematografía de post guerra como Pier Paolo Pasolini y Martin Scorsese.
Noviembre
- Viernes 11 a las 20:00 La Riccota (P. Pasolini) 40´
- Sábado 12 a las 16:00 La conspiración de los boyardos (S. Eisenstein) 88′
- Viernes 18 a las 21:00 El conformista (B: Bertolucci) 111′
- Domingo 20 a las 16:00 La última tentación de Cristo (M. Scorsese) 164’
Diciembre
- Sábado 3 a las 16:00 La hipótesis del cuadro robado (R. Ruiz) 66′
- Sábado 10 a las 16:00 Caravaggio (D. Jarman) 97′
- Sábado 17 a las 16:00 Caravaggio-Documental (A. Longoni) 130′
Auditorio del Instituto Italiano de Cultura (Triana 843, Providencia)
Ciclo de proyecciones Caravaggio y Teatro: Tres documentales basados en famosas puestas en escena teatrales que representan la importancia histórico-estética de Caravaggio. Las funciones se llevarán a cabo el 24 de octubre, 28 de noviembre y 12 de diciembre, a las 19:00 y 20:00 horas.