El 7 de septiembre de 1822, el príncipe de Portugal, Pedro de Bragança, declaró a Brasil como una nación independiente. Hoy, 200 años después, nos sumamos a sus celebraciones y les invitamos a revisar los espacios en la capital que nos conectan con la cultura carioca.
Con el famoso «Grito de Ipiranga» el entonces príncipe regente Pedro proclamó la independencia de Brasil del Imperio de Portugal el 7 de septiembre de 1822. Tras el fin de las Guerras Napoleónicas y el regreso de su padre, el rey Juan VI, al poder, Pedro se rebeló abiertamente. La historia cuenta que desenvainó su espada y exclamó: «¡Independencia o muerte!».
Prácticamente sin derramamiento de sangre, Pedro de Bragança se convirtió en el primer emperador de Brasil, imperio que se desplomó recién en 1889 para dar paso a la República. En el intertanto, y durante casi todo el siglo XIX, la nación mantuvo la esclavitud, la familia real, y la aristocracia con todos sus títulos nobiliarios.
Con motivo de esta efeméride, buscamos la huella de la cultura brasileña en Santiago. Distintos restaurantes, pero también plazas y monumentos, reivindican a la tierra de Pelé y Xuxa en nuestra capital, con distintos nombres y rostros emblemáticos del país mais grande do mundo. A pesar de la lejanía y la barrera idiomática, hay distintos espacios donde los cariocas pueden sentirse como en casa.
Barrio Brasil
El popular barrio santiaguino debe su nombre al hecho de que, entre 1900 y 1940, se ubicó aquí la Embajada de Brasil, específicamente en calle Compañía 2075, donde aún se ubica el Palacio Manríquez. El inmueble, que actualmente alberga una galería comercial, fue construido a comienzos del siglo XX con el objetivo de albergar a las dependencias diplomáticas. Frente al mismo, en medio de la plaza, encontramos un particular monumento, dedicado nada menos que al cantautor brasileño Antonio Carlos Jobim (1927-1994). El monolito al maestro de la bossa nova fue inaugurado por el entonces Presidente Fernando Henrique Cardoso, durante su visita a Chile en 1995.
Hacia el final del barrio, en la intersección de Brasil con Alameda, encontramos otro hito urbano de la presencia carioca: el busto a José María da Silva Paranhos Junior, el Barón de Río Branco (1845-1912). Diplomático, historiador y canciller, es recordado como el patrono de la diplomacia brasileña. En el pedestal, se lee la frase en latín “Ubique Patriae Memor”, y más abajo su traducción: “Recuerdo a mi Patria en todas partes”.
La nueva embajada
Tras dejar el barrio, en 1941, la Embajada se instaló en su actual ubicación en el Palacio Errázuriz Urmeneta en el sector de Los Héroes, junto a la carretera Panamericana. En la misma ubicación, se encuentra el centro cultural Thiago de Mello. El nombre es un homenaje al poeta brasileño del mismo nombre, nacido en 1926, y muerto a inicios de este año. El recinto está en remodelaciones y por ahora no tiene fecha para su apertura al público.
Centro Cultural Brasileño
En el piso 15 de Mac Iver 225, se encuentra el Centro Cultural Brasileño. Aunque medio escondido, el lugar cuenta con una amplia biblioteca, y realiza en sus dependencias cursos de portugués, entre otras actividades.
Edificio Copacabana
Ubicado en plena Alameda, entre Santa Lucía y Universidad de Chile, está el Edificio Copacabana. No encontramos ninguna relación directa con Brasil, pero lo concreto es que el inmueble cuenta con dos murales de una de las playas más famosas del país carioca.
El Duque
En el Patio Bicentenario de la Escuela Militar, en Las Condes, es posible encontrar monumentos de próceres de casi todos los países de América Latina, regalados con motivo del Bicentenario de Chile. Brasil no podía quedarse fuera, y marcó su presencia con un busto a Luís Alves de Lima e Silva, el Duque de Caxias (1803-1880).
Héroe de la guerra del Paraguay, senador vitalicio y único duque en la historia de Brasil. Participó también en la guerra contra Argentina, la guerra civil brasileña, y lideró la represión contra distintas revueltas de esclavos (como senador, el duque fue un férreo defensor de la esclavitud).
Caxias cuenta con otro monumento en Valparaíso, específicamente en la Avenida Brasil. Se trata también de un busto, en un pedestal mucho más grande, pero fue decapitado hace más de 5 años y aún hoy no ha sido restaurado.
Alberto Santos Dumont
Muy conocida es la avenida Santos Dumont en Recoleta, pero pocos saben que el nombre es un homenaje al pionero de la aviación Alberto Santos Dumont (1873-1932). Para muchos, este inventor brasileño es el verdadero Padre de la Aviación, dado que en octubre de 1906, despegó en una aeronave impulsada con un motor aeronáutico, siguiendo un circuito preestablecido, y con la presencia de especialistas y distintos testigos (los Hermanos Wright hicieron su famoso primer vuelo en diciembre de 1903, pero sin cumplir con todas esas condiciones).
El ingeniero estuvo dos veces en nuestro país, en 1916 y 1922. En ambas fue recibido como un héroe y pudo conocer a los primeros pilotos formados en Chile. Para la segunda visita, ya había sido rebautizada la avenida con su nombre, la cual pudo conocer en persona. Según explicó Santos Dumont, su regreso a Chile fue motivado por el deseo de “volver a estrechar las manos de tan buenos amigos que aquí dejé, como para agradecer la delicadeza que tuvo la Municipalidad de Santiago al poner mi nombre a una de las calle de la ciudad”.
En 2018, el municipio de Recoleta inauguró un busto en su honor en la avenida homónima, a la salida del metro Cerro Blanco.
Los otros personajes
La selección de personajes inmortalizados en los monumentos nos llamó la atención, entre otras cosas, porque el país del fútbol no homenajeó a ningún futbolista, pero sí seleccionó a personajes aún hoy desconocidos por la mayoría de los chilenos, como el duque y el barón. Por lo anterior, decidimos hablar con dos chilena-brasileñas para conocer su opinión: Amanda Marton Ramaciotti, periodista de The Clinic, e Irací Hassler, alcaldesa de Santiago, y esto fue lo que nos dijeron:
Hay cinco monumentos a personajes brasileños en Santiago: en la Plaza Brasil, el monumento a Antonio Carlos Jobim; en Brasil con Alameda, el Busto del Barón de Río Branco; en la Escuela Militar, el Duque de Caxias; en la Embajada, el Centro cultural Thiago de Mello; y en Recoleta, el monumento a Alberto Santos Dumont. Dos personajes del imperio, dos artistas del siglo XX, y un inventor ¿Qué te parece esta selección?
Amanda Marton: Sobre los personajes del imperio, yo creo que eso tiene que ver con que en Chile se valora mucho lo que fue España. A mí me llama muchísimo la atención eso. En Brasil, pese a que tuvimos la monarquía allá, y una comunidad portuguesa importante, nosotros no tendemos a idolatrar a aquellos que fueron nuestros colonizadores. Y yo siento que acá en Chile eso ocurre mucho, aún hoy viven pendientes de lo que pasa en España. Que tengamos esas dos estatuas acá es más una postura de Chile, de valorar el período de la colonización. Hay otros personajes mucho más interesantes, si me lo preguntas.
Sobre los artistas, me parece curioso que el monumento sea de Tom Jobim, que era un gran compositor, pero no de Vinicius de Moraes o Jorge Amado, que era muy cercano a Pablo Neruda.
Irací Hassler: No a todos los conozco en profundidad, pero sin duda Antonio Carlos Jobim es un personaje muy histórico y relevante de la música popular brasilera y me parece maravilloso que lo tengamos en nuestra comuna. Creo que la música brasileña tiene una tremenda trascendencia, a pesar de la dificultad del idioma.
Si un santiaguino se queda solo con lo que le muestra el espacio público, tenemos estos cinco personajes de origen brasileño: ¿te parece que son representativos de Brasil?
Amanda Marton: No, en absoluto. Como te decía, Brasil es un país muy complejo, pero por último si van a tener un personaje muy representativo, tengamos a alguien de la política actual. Podríamos tener a Fernando Henrique Cardoso, que para mí es el hermano gemelo de Ricardo Lagos, o a alguien como Lula Da Silva, que fue un gran exponente de la izquierda latinoamericana y mundial durante mucho tiempo, y sigue siendo importante a nivel político. Para mí sería mucho más válido reconocer a estos grandes rostros, o a Joao Goulart, que fue uno de los primeros en sufrir un golpe de Estado, al igual que Salvador Allende, guardando las proporciones, porque Goulart pudo exiliarse en Uruguay. Para mí no es lo suficientemente representativo.
Preferiría quizás tener un personaje negro de la historia brasileña, o alguien que haya luchado por la independencia o los derechos de Brasil, Zumbi dos Palmares, Tiradentes, habría elegido otros personajes históricos que en Brasil son mucho más importantes.
Irací Hassler: Lo primero que me surge, es que son puros hombres. Brasil tiene un poco más de la mitad de su población que son mujeres. Creo que por ahí hay una falta. Así como se destaca a Antonio Carlos Jobim, hay mujeres también de la música brasilera que son muy destacadas. No sé, Ana Carolina, Elis Regina, otras… y bueno, la selección más militar, del Ejército, creo que no es lo más representativo o lo más interesante que nos podría aportar el vínculo con Brasil. Creo que hay otras cosas que podrían ser más características, del vínculo que hemos tenido históricamente entre Chile y Brasil.
Por su parte, la Embajada de Brasil en Chile agregó que “el gobierno brasileño estaría dispuesto a estudiar formas de contribuir a la restauración de monumentos junto con las autoridades chilenas pertinentes”.