*Por Paulina Cabrera C.

La materia y el vacío. Anish Kapoor toma esta dualidad y la impregna en su obra, en una constante búsqueda, una duda como el mismo reconoce en torno a la materia y la no materia. Esta pregunta en torno a lo intangible, a lo oculto, a reconocer que “no vemos lo que realmente vemos” lo ha llevado a reflexionar en torno al cuerpo, el cuerpo como contenedor de sangre y el interior. “Está mi cuerpo, pero cuando cierro los ojos está el espacio interior que es mayor”. Desde ahí crea, sintiendo “el limbo y su oscuridad”, los objetos de ficción que a su vez crean propuestas filosóficas y en donde lo que está en la obra sale de la obra generando preguntas entre los espectadores. Su material artístico se vuelve entonces, un material ritual.

Nacido en India en 1954, vive desde los años 70 en Londres desde donde ha proyectado su trabajo convirtiéndolo en un referente mundial de la escultura. Una de sus obras más conocidas es Cloud Gate (2004) una gigantesca semilla de acero de 20 metros de altura instalada en el Millennium Park en Chicago. Además de Sky Mirrow (2006) exhibida en el Rockefeller Center de Nueva York y en Kensington Gardens de Londres y Ark Nova (2013) la primera sala de conciertos inflable del mundo.

De ahí la importancia de Surge, la muestra de nueve obras que da comienzo a su primera itinerancia por Latinoamérica y que llega a Chile gracias a Fundación CorpArtes y Moneda Asset Management.

Cera, espejos, acero y realidad visual
El trabajo de Anish sorprende desde la explanada del centro cultural de Rosario Norte con Organ, una turbina fabricada en 1968 por la fábrica Rolls Royce similar a la que utilizaron los Hawker Hunter que bombardearon la Moneda en el golpe militar de 1973.

Según relevó el curador brasileño Marcello Dantas, en 1974 las turbinas que se usaron en el bombardeo fueron enviadas a la Rolls Royce en Escocia para ser reparadas, sin embargo los trabajadores se opusieron en solidaridad a lo que estaba viviendo nuestro país. “No podemos reparar herramientas de la muerte”, explicó el propio Kapoor sobre la reacción de los escoceses, reacción que quiso citar en la obra que creó especialmente para la exposición en Chile.

Ya en las salas, el recorrido parte con Doble vértigo (2012) un “túnel” de dos espejos curvos de acero confrontados y Vacío (1993) que te invita a experenciar la nada con un espacio pintado con el pigmento negro más negro del mundo (patentado por Kapoor). Sin embargo, es con Disparando en la esquina (2008-2009) con el que te sorprendes y te sobresaltas con un cañonazo de “sangre” de cera sólida roja.

En la siguiente sala te encuentras con No objeto (puerta) de 2008 que con sus reflejos vuelve a jugar con la realidad; Cuando estoy gestando (1992) que pareciera ser un ente que quiere salir de la pared y Dragón (1992), un conjunto de formas de terciopelo azul que encantan por su belleza. Sin embargo, la obra de mayor tamaño es Svayambhu (2007) del sánscrito que significa auto-creado, y que es un enorme bloque de cera esculpido que se mueve lentamente a través de pilares de la sala.

Una exposición que también incluye la realidad virtual con la obra En ti mismo caer (2018) que ofrece un viaje vertiginoso hacia el cuerpo como lo imagina Kapoor, técnica que para el artista aún no alcanza su máximo potencial. Espera el día en que pueda crear la experiencia de caer hacia un objeto, caer hacia dentro del color.

No te pierdas Surge, como dice su curador, una exposición que es una cuando se fotografía y que es otra cuando se ve en persona.

Dónde: CorpArtes, Rosario Norte 660, nivel -2
Cuándo: Del 28 de abril al 8 de septiembre, de martes a domingo de 11.00 a 18.30 horas (excepcionalmente también estará abierto el lunes 29 de abril)
Cuánto: Entrada general a $2.000, estudiantes y tercera edad $1.000 / Visitas guiadas sábados a las 19.00 horas (Entrada general $ 4.000, estudiantes y tercera edad $2.000).

 

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